martes, 25 de enero de 2011

El género epistolar



"El género epistolar, cuyo forma de expresión tradicional es el texto que comúnmente conocemos como carta, es uno de los más libres que existe dado que abarca una gran cantidad de temas y propósitos, expuestos de manera diversa, siempre y cuando cuente con un destinatario a quien va dirigida la carta y sus respectivos encabezamiento, saludo y despedida. En el cuerpo de la carta pueden aparecer recomendaciones, comentarios, solicitudes, diálogos, narraciones, poemas, notificaciones, argumentaciones de todo tipo hasta saludos y despedidas. En relación con sus objetivos y el ámbito de interés. una carta puede ser privada, pública, oficial, abierta, doctrinal, científica, poética o amorosa. Evidentemente, su clasificación depende del grado de universalidad del mensaje que contenga, de la cantidad de personas a la que la carta puede alcanzar con sus significados.

Con el transcurrir del tiempo, el género epistolar ha cambiado su función en el mundo: la posibilidad de comunicación inmediata hace que se impongan los mensajes fragmentados, pequeñas piezas de lo que anteriormente eran las largas comunicaciones que escritas con pluma y contenidas en sobres lacrados viajaban por semanas o meses de un lugar a otro de un país o entre países y continentes para transmitir informaciones, pensamientos y sentimientos. Sin embargo, todavía hoy se escriben cartas y, aunque no lleguen con la frecuencia que solían hacerlo, todavía sentimos esa fascinación cuando un sobre o incluso un correo electrónica con cierta extensión nos llega, nos habla directamente y nos trae algo de la esencia del remitente.

Y si existe un tipo de carta que todavía tiene una vigencia fácilmente comprobable es la carta amorosa porque no existe dispositivo de comunicación que nos resuelva uno de los eternos retos humanos: ¿cómo puedo expresar lo que siento? Hace falta la voluntad de hacerlo, el sentarnos a escribir, el tener siempre presente la persona a quien dirigimos la carta, necesitamos imaginación pero también corazón, creatividad y sentimiento pero no debemos dejar de lado los argumentos. En la guerra, en el amor y en las cartas de amor todo parece estar permitido. Escribimos con ese tono íntimo y secreto de quien susurra pero, también, toda persona que le escribe al objeto de su amor quiere trascendencia, quiere que otros puedan entender el placer que obtiene cuando es correspondido y el martirio que significan las esperas, los rechazos, las despedidas y las rupturas.

Por eso, cuando escribimos una carta de amor, no escribimos sólo para que una única persona nos entienda sino también para que aquél que por accidente o con nuestra aprobación lea el texto, nos conozca un poco más y pueda él también reencontrarse, en su labor de lector, con las complejidades de ese sentimiento inabarcable que es el amor."

Autor: Jesús Nieves Montero

viernes, 21 de enero de 2011

Escritura Creativa, la carta creativa








La escritura, al igual que el hablar, escuchar y leer, es una modalidad de comunicación que puede estudiarse y enseñarse como un sistema diferente en estructura y función a las otras artes del lenguaje. La escritura permite expresar la cultura y el arte en una diversidad virtualmente inagotable de formas.

Consideremos a la Escritura Formal que es un texto teórico-práctico que presenta los procesos de la escritura tanto en su carácter específico como en su relación con las otras áreas, especialmente con la de la lectura.

La diferenciamos de la Escritura Creativa: “La escritura creativa es la que defiende y busca conscientemente valores estéticos en el uso del lenguaje, independientemente del género en el que se enmarque el texto” (Nieves Montero, 2009)

Dentro de esta lógica tenemos que, el género epistolar es diferente del género literario epistolar, en el que se funda la forma estética y la idea literaria.

Si precisamos la definición de Epístola, según el Diccionario de la lengua española © 2005 Espasa-Calpe:

1. f. Obra literaria en forma de carta, en prosa o verso, con un objetivo moralizante, didáctico o humorístico:

2. las epístolas de Lope de Vega son muy interesantes.

3. Escrito que se dirige a determinadas personas, en especial los de los apóstoles a los fieles: la Epístola de san Pablo a los Corintios.

4. En la Iglesia católica, parte de la misa anterior al evangelio en la que se lee un fragmento de alguna epístola de los apóstoles.

Tenemos entonces que una epístola es una escritura dirigida o enviada a una persona o un grupo de personas que habitualmente toma la forma de carta; con el devenir del tiempo, la epístola se transformó en un texto casi ensayístico dignificado por un estilo exigente y formal, muy a menudo provisto de intención didáctica o moral, pero otras veces consagrado a una mera función distractiva o emocional.

La epistolografía (del griego πιστολή, «carta» y γραφία, «escritura») es una actividad literaria que consiste en escribir cartas. Por su temática y su uso del 'yo', la epístola se encuadra dentro de la escritura creativa, junto con la autobiografía, las confesiones, el diario, las memorias y el monólogo.

La carta o epístola, vemos pues, es un género muy flexible, que se presta a múltiples usos y clasificaciones. Desde el punto de vista del emisor, cabe distinguir cartas reales, apócrifas y ficticias. Por su interés literario, histórico o antropológico, algunos de los tipos más notables son los siguientes:

Carta abierta: aunque tiene un destinatario concreto, el autor la envía a un medio de comunicación. Suele contener críticas o peticiones, y su publicación funciona como una forma de presión. Un ejemplo célebre es Yo acuso, de Émile Zola, carta abierta dirigida al presidente de Francia sobre el Caso Dreyfus. El escritor español Fernando Arrabal ha publicado varias cartas de este tipo (Carta al general Franco, Carta a Fidel Castro, Carta a Stalin).

Carta apócrifa: es aquella que se atribuye, falsamente, a un autor célebre. Algunas cartas apócrifas, consideradas auténticas por muchas personas, han ejercido una influencia notable: tal es el caso de la presunta correspondencia entre Jesucristo y el rey sirio Abgaro V de Edesa que Eusebio de Cesárea incluye en su Historia eclesiástica. En los siglos XX y XXI, algunos autores recurren a la carta apócrifa como recurso literario: así, C. S. Lewis escribe Cartas del diablo a su sobrino (1942) y Fernando Sánchez Dragó publica en 2001Carta de Jesús al Papa.

Carta de amor: aunque se trata en principio de un documento privado, trasciende esta categoría para convertirse en un género literario específico, de lo que da fe la convocatoria de concursos de este tipo de cartas. Desde 1937, en que llega la primera misiva, la ciudad de Verona recibe innumerables cartas de amor dirigidas a Julieta. Asimismo, la correspondencia entre Pedro Abelardo y su amante Eloísa puede considerarse un clásico del género.

Carta ficticia: es aquella que se atribuye a un personaje de ficción. El sofista griego Alcifrón es el autor clásico de este tipo de cartas, puestas en boca de personajes típicos o pintorescos, como parásitos y cortesanas.

Epístola en verso: su referente clásico son las Epístolas del poeta latino Horacio y las cartas en verso que Ovidio escribe desde el exilio (Pónticas). En el siglo XX, el poeta vasco Gabriel Celaya recupera esta tradición en su libro Las cartas boca arriba (1951).

Novela epistolar: numerosas novelas incluyen cartas de alguno de los personajes. En la antigüedad tardía, Heliodoro y Aquiles Tacio, usan ya el recurso. Cuando toda la novela (o al menos parte importante de ella) consta de una o varias cartas, hablamos de novela epistolar. Son ejemplos célebres Las amistades peligrosas de Pierre Choderlos de Laclos y Los idus de marzo de Thornton Wilder.

Estructura de la carta o epístola

Una estructura típica incluye las siguientes partes: -Introducción -Primera parte, de carácter teórico-doctrinal -Segunda parte, exhortación moral –Conclusión.

Una estructura creativa puede modificar dicha estructura con una superposición de los planos temporales.

La historia de la epistolografía comienza en la antigua Mesopotamia y Egipto. Para entender las cartas que se conservan de esta época hay que tener en cuenta que la escritura es entonces una técnica especializada al alcance de muy pocas personas. De ahí que se trate, sobre todo, de correspondencia oficial o mercantil. En Egipto, tienen especial importancia las Cartas de Amarna, que recogen la correspondencia diplomática de los faraones Amenofis III y Akenatón y arrojan luz sobre las relaciones del Egipto de la época con las naciones vecinas.

La epistolografía goza de gran consideración como género literario en el mundo grecolatino. Se concibe la carta como una "conversación por escrito", de estilo austero y claro. La composición de epístolas apócrifas y ficticias es uno de los ejercicios favoritos de rétores y sofistas. Así, el sofista griego Alcifrón debe su fama a sus cartas ficticias (ordenadas en cuatro series: cartas de pescadores, de labradores, de parásitos y de cortesanas). Uno de los desarrollos más interesantes del género es la epístola en verso, cultivada por Horacio y otros poetas. En sus Heroidas, Ovidio ofrece 21 cartas de amor, puestas en boca de personajes femeninos célebres, como Safo, Penélope y Dido. Las cartas de Cicerón, sin ser la parte más importante de su obra, se consideran un testimonio de gran valor sobre la vida del autor y la cultura y manejos políticos de la Roma de su época. Destacan también, entre otras, las cartas del filósofo Séneca, de Plinio el Joven y de los sofistas Luciano, Claudio Eliano y Filóstrato. Las cartas o epístolas de Pablo de Tarso y otros autores cumplen una función muy especial en el Nuevo Testamento, permitiéndonos conocer algunos de los conflictos y puntos de vista de los primeros núcleos cristianos. Algunas de ellas se consideran hoy apócrifas. Lo mismo sucede con el epistolario de los primeros padres de la Iglesia, como Ignacio de Antioquía y Clemente de Roma.

De la antigüedad tardía se conservan epistolarios de gran interés, tanto de autores paganos (Libanio, Juliano el Apóstata) como de padres de la Iglesia (Gregorio Nacianceno, Gregorio de Nisa, Juan Crisóstomo, Sinesio de Cirene, Teodoreto de Ciro).

El estudio de los epistológrafos grecolatinos ha generado una bibliografía voluminosa, volcada en un primer momento hacia las cartas como material auxiliar para el estudio de otros géneros y materias. En los últimos años, la epistolografía ha comenzado a despertar interés por sí misma, como un género literario con valor propio.

Edad Media. La cultura bizantina produce también epistolarios de gran riqueza, como los de Eustacio de Tesalónica, Juan Tzetzes y Miguel Psello.

En el Renacimiento, Siglos XVI y XVII, Petrarca y Erasmo de Rotterdam, entre otros, siguen cultivando con acierto el género. La correspondencia de Erasmo con Martín Lutero se considera un documento esencial para entender la Reforma Protestante. Erasmo y Juan Luis Vives escriben sendos manuales sobre el arte de escribir cartas, con el mismo título (De conscribendis epistolis, de 1522 y 1536, respectivamente).

En España, la epístola poética conoce un momento de esplendor en el Siglo de Oro, con creaciones como la Epístola a Boscán de Garcilaso de la Vega y la Epístola moral a Fabiode Andrés Fernández de Andrada.

Los autores ilustrados del siglo XVIII retoman con interés el género, utilizado por ejemplo por Voltaire (Cartas filosóficas, Cartas de Memmius), Montesquieu (Cartas persas), José Cadalso (Cartas marruecas) y el Padre Feijoo (Cartas eruditas y curiosas). A finales de siglo, Pierre Choderlos de Laclos publica Las Amistades Peligrosas, novela epistolar de enorme éxito.

La epistolografía sigue viva en el romanticismo con creaciones como Cartas desde mi celda y Cartas literarias a una mujer, del poeta español Gustavo Adolfo Béquer. Se publican también en este período novelas epistolares célebres, como Las cuitas del joven Werther de Goethe, Frankenstein o el moderno Prometeo de Mary Shelley y Drácula de Bram Stoker.

Los autores realistas recurren también a la novela epistolar, que les permite ahondar en la psicología de los personajes. Un ejemplo notable es la primera parte de Pepita Jiménez, de Juan Valera.

En el siglo XX, las cartas de Howard Phillips Lovecraft y J. R. R. Tolkien se consideran parte esencial de la obra de estos autores, pues iluminan muchos aspectos de su obra de ficción. Algo similar puede decirse de poetas como los españoles Juan Ramón Jiménez y Vicente Alexandre y el nicaragüense Rubén Darío en su libro Las cartas boca arriba (1951), el poeta vasco Gabriel Celaya recupera la tradición de la carta en verso, de estirpe horaciana, relativamente abandonada en los tiempos actuales del siglo XXI.

Los criterios de selección del Concurso Cartas de Amor, patrocinado por Montblanc este año 2011, cuyo tema es obviamente el amor, corresponden a lo que configura al género epistolar: una escritura dirigida o enviada a una persona o grupo de personas, y abarca una muestra heterogénea en contenido y forma, por lo tanto, la creatividad es lo que impera, con la libertad de expresar emociones a través de prosa poética.

Enfatizamos en que se debe observar la estructura emisor - destinatario (reales o imaginarios), transmitir un alto grado de emocionalidad, ser breves (un máximo de dos cuartillas), sin errores ortográficos o de sintaxis, es decir, el enlace y relación de las palabras para formar oraciones relacionadas entre sí.


Foto: carta de Joan Miró a Josep Tremoleda (1965)

Fuente: Flirck

Diplomado en Narrativas contemporáneas



La Universidad Católica Andrés Bello, anuncia la apertura de la primera edición del Diplomado en Narrativas Contemporáneas. En el diplomado Narrativas Contemporáneas, el arte narrativo y distintas áreas de la comunicación se funden para aportar más y mejores conocimientos dentro del aprendizaje interdisciplinario tan apreciado y anhelado en estos tiempos. Las historias son el centro de nuestra sociedad, y el mejor profesional es aquel que sabe contar las mejores historias en cualquiera de los ámbitos comunicativos.

Dirigido a: Estudiantes, profesores y graduados tanto de pre-grado como de postgrado en la UCAB.

Objetivos: El manejo por parte del estudiante de un amplio espectro de la estructura narrativa dentro del gran marco que constituye la comunicación literaria y de masas; la comprensión de los signos en la sociedad y su fusión con las distintas formas narrativas contemporáneas; y la aplicación de la escritura creativa como elemento fundamental de enlace entre la literatura, la comunicación periodística y la sociedad.

Lugar: Urbanización La Castellana, Chacao, Av. Santa Teresa de Jesús, Edif. CERPE, Nivel 1.

Asignaturas y profesores:

Primer Trimestre Arte narrativo 1, Crónica de autor

Segundo Trimestre Arte Narrativo 2, Signos y sociedad

Las asignaturas serán impartidas por los profesores Fedosy Santaella, Roberto Echeto y Humberto Valdivieso.

Inicio: 21 de enero de 2011

Duración: Dos trimestres (144 horas académicas)

Inscripción: Realizar el depósito bancario en efectivo a nombre de: Universidad Católica Andrés Bello. Banco / N° de Cuenta: Mercantil, Cuenta máxima N° 0105-0618-24-8618000191. Solicitar la planilla de inscripción al correo narrativacontemporanea@gmail.com
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Recaudos: Copia de la cédula de identidad, fotografía de frente tipo carnet, fotocopia del título de bachiller o universitario, síntesis curricular.

Inversión por participante: Regular: Hasta el 05 de enero 2011 Bs. 3.500 (los dos trimestres) Tardía: Del 06 al 18 de enero 2011 Bs.4.000ºº (los dos trimestres)

Forma de pago: Regular: Inscripción Bs. 1.500ºº/dos cuotas de Bs.1.000 c/u Tardía: Inscripción Bs. 2.000 /dos cuotas de Bs.1.000 c/u

Coordinación general: María de los Ángeles Taberna Email:narrativacontemporanea@gmail.com Teléfono: 0212 – 407.60.38

Coordinación académica: Fedosy Santaella Email: fedosy@gmail.com Teléfono: 0414 – 398.91.31

Fedosy Santaella Finalista del Concurso Cosecha Eñe 2010



TRANSCRIBO LA NOTICIA:

"MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) –

El escritor argentino Horacio Convertini ha resultado ganador de la quinta edición del concurso de relatos Cosecha Eñe 2010 por su narración 'Uru'. El premio está dotado con 3.000 euros y el relato será publicado en el nuevo ejemplar de 'Eñe', correspondiente al invierno de 2010, junto a los del resto de los finalistas.

Los miembros del jurado coincidieron en que 'Uru' recuerda a aquellos relatos del escritor uruguayo Juan Carlos Onetti por el tema elegido y por su "premisa dramática", sobre todo a 'Jacob y el otro', el relato de Onetti que dio lugar a la película 'Mal día para pescar', dirigida por otro autor que también participará en el festival, el director de cine Álvaro Brechner.

El relato de Horacio Convertini cuenta la historia que guarda en el recuerdo el narrador, que vuelve a su infancia en la capital uruguaya para rememorar a Washington Maldonado, Uru, un compañero de escuela que marcó un episodio de su vida y la de otros compañeros de clase y que, además, representó la ilusión del heroísmo.

Horacio Convertini (Buenos Aires, 1961) es periodista, editor del diario 'Clarín'' y escritor premiado en su país y España. Ha publicado la novela 'El refuerzo' (2009; 2010), el libro de relatos 'Los que están afuera' (2008) y las novelas infantiles 'La leyenda de Los Invencibles' (SM, 2008) y 'La noche que salvé al Universo' (2010).

JURADO Y FINALISTAS

El jurado ha estado formado por los escritores Luis Mateo Díez, Rosa Montero y Pilar Reyes, directora editorial de Alfaguara, así como por Camino Brasa y Toño Angulo en representación de Eñe.

Los finalistas de Cosecha Eñe 2010 han sido Jon Bilbao, Julio Trujillo, Marcelo Luján, Eduardo Verdú Ferrándiz, Fedosy Santaella, Gabriel J. Gil Pérez, Verónica Martín, Ernesto Pérez Castillo y Carlos Burgos.

La entrega de este premio, que ha recibido 2.074 relatos procedentes de 36 países, ha tenido lugar este viernes en el Teatro Fernando de Rojas del Círculo de Bellas Artes de Madrid, dentro de las actividades de la segunda edición del Festival Eñe Madrid."

"Sandor y los conejos es un cuento en clave de reportaje que habla sobre un enigmático mago que hacía cosas increíbles con los conejos, y que luego terminó como actor porno”, comenta Fedosy. “Rinde homenaje a Foster Wallace y a Hunter Thompson, entre otros autores y personajes de la farándula. Siempre bajo la clave del humor”, agrega.

Entorno al reconocimiento, Fedosy también expresa: “es bueno saber, gracias a este premio, que lo que estamos escribiendo los venezolanos se considera en España literatura de calidad, y que estamos allí, entre escritores reconocidos que escriben en español y que están haciendo un gran trabajo.”

El premio se estregó el pasado viernes 12 de noviembre en el Teatro Fernando de Rojas del Círculo de Bellas Artes de Madrid, dentro de las actividades de la segunda edición del Festival Eñe Madrid.

De la Heroicidad que se bebe



Nuestros objetos de disertación son Simón Bolívar y Gatorade. La raza humana es guerrera. Hoy día estamos en varios tipo de guerra, uno de ellos es el de la guerra mediática y publicitaria. El ganar está asociado a una necesaria gesta heroica y a las estrategias implementadas correctamente. Simón Bolívar en el siglo XIX, emocionó a los pobladores de la Venezuela de ese tiempo, con la esperanza de consumir un producto: la libertad. y la emancipación económica. Este producto fue promocionado correctamente, pues la independencia económica de nuestro país se logró, a pesar de las penurias de la lucha, la emocionalidad y la vehemencia que explotó en el pueblo Simón Bolívar, dio los frutos esperados. La república instaurada fue evolucionando hacia otros derroteros en el que, ya agotado el prócer, no tenía cabida. Después de su muerte, él pasó a ser un producto más, gradualmente.

Gatorade realiza un impulso similar: bebida energizante para ganar la contienda deportiva y la diaria del trabajador rutinario, enviando el mensaje claro “si consumes la bebida restauradora de fluidos de los héroes del siglo XXI, serás también un triunfador.

Simón Bolívar y Gatorade son símbolos poderosos, tal como marcas registradas, en el mundo cívico militar, el primero, y en el social deportivo, el segundo. ¿Qué sucedería si los asociásemos en una campaña publicitaria? Si tuviésemos la licencia para hacerlo como estrategia de mercado hoy, tendríamos éxito, sin duda.

La explotación de Simón Bolívar hoy como héroe de la Patria es intensa y constante, porque funciona, porque es la legitimización de productos cívico militares.

El uso de Simón Bolívar como imagen lo inició Antonio Guzmán Blanco, conocido como el autócrata civilizador y su pariente lejano, al crear el bolívar de plata como unidad monetaria nacional, el día 31 de Marzo de 1.879 y nombrar la plaza central de la ciudad de Santiago de León de Caracas como Plaza Bolívar en la que se erigió la estatua ecuestre del recién nombrado como “El Libertador”, obra de el escultor Adán Tadalini, el día 7 de Noviembre de 1.874, dando inicio a una suerte de franquicia: en toda ciudad o pueblo venezolano, la plaza central es denominada “Plaza Bolívar”. Se dio inicio al uso y abuso de la figura de Simón Bolívar como figura emblemática e inspiradora de la Patria, de progreso y de revolución justificada por nobles propósitos, como la Libertad. Antonio Guzmán Blanco, astuto político, detectó la necesidad de renovar el entusiasmo y la felicidad de las masas, e ideó, así, una ruta de la conciencia de masas a través de héroes, en especial Simón Bolívar, quizás no haya sido el primero en el mundo, su admiración por la cultura francesa, es muy probable que le haya dado luces al respecto. La utilización de Simón Bolívar como imagen y símbolo patrio continúa vigente.

Gesta heroica de la guerra de independencia tiene su correlativo en la gesta heroica de los deportistas actuales, por alcanzar la hegemonía individual o de sus equipos sobre otros.

Gatorade es un producto de consumo de masas, por lo tanto aplica la Psicología del consumo. Psicología de la realización y el logro por vía de la emancipación. Creado por el Dr. Robet Cade, para controlar el delicado equilibrio corporal de los atletas, en los encuentros deportivos, ascendió en su rata de consumo vertiginosamente, después del apoyo que le dio el “Miami Herald” (1966), en una reseña, donde se exaltaban las propiedades de Gatorade, la bebida que sentir confortables y competitivos a los miembros del equipo ganador el “Florida Gators”, del que tomó el nombre definitivo el producto, durante el encuentro. En algunas fotos publitarias enmarcan a determinados atletas en una suerte de horizonte, de nubes electrificadas, muy parecido al fondo de la obra pictórica “Mi delirio sobre el Chimborazo”, que recrea a un Simón Bolívar rehaciéndose.

La marca comercial Gatorade, es denominada como “bebida milagrosa” y explota la heroicidad de sus consumidores estrella, asociando su consumo al éxito de sus gestas. Es uno de los patrocinadores en más de ochenta países, de numerosos equipos, ligas y federaciones deportivas.

Concluimos que en nuestro siglo XXI, los promotores de la marca registrada Simón Bolívar, apoyarían y promocionarían Gatorade, dada la posibilidad, él mismo lo haría, no lo dudamos, pues su inteligencia de líder detectó la oportunidad de abrir una franquicia de España en las Indias, demostró su poder para promover productos a través de la manipulación emotiva y los empresarios de Gatorade también estarían encantados en esta alianza, pues todos nos queremos asociar con figuras relevantes, exitosas y emblemáticas

Está bien, es el negocio.


Fotomontaje por Olga Fuchs